En la revista Reaper (Cosechador), David G. Stewart, escribió lo siguiente: "En la India solíamos reírnos entre dientes de la pujah al bebé, o la adoración al bebé. Todas las mujeres se reúnen alrededor del bebé en brazos, y hacen chasquidos con la lengua como gallinas cluecas en señal de aprobación, y toman nota del supuesto parecido a la mamá o al papá, y sostienen los dedos, tocan la mejilla, besan los pies. Un término favorito para describir al bebé varón era "Pequeño Rajá, Pequeño Rey".
Aunque esta gente no se inclinan ni adora al bebé recién nacido, se observa que valoran la venida al mundo de un niño, el nacimiento de un nuevo ser, a tal punto llega su atención a este hecho que no es de sorprenderse que llamen a este evento "la adoración al bebé".
Cuando Jesús nació en un humilde pesebre, Él también recibió adoración y honra. Los pastores dejaron sus rebaños en los campos para adorar al bebé del pesebre. Los "reyes magos" dejaron su tierra (Persia) para adorar al bebé... porque de una u otra manera entendieron que ese bebé era un niño diferente... era el Rey de reyes y Señor de señores.
Sin embargo, a medida que ha pasado el tiempo se ha ido perdiendo el verdadero sentido de la Navidad, el sentido establecido en las Escrituras. Hoy es 15 de diciembre, estamos a nueve días del 25, te pregunto ¿cuál es el sentido que tienes con relación del nacimiento del Mesías, el Salvador del mundo? ¿cuál es la motivación o el sentimiento que te anima o te embarga en estos días? ¿es simplemente pavo, lechón, chocolate, panetón y regalos, o una buena compañía a tu lado?
Aún más, estarías dispuesto a inclinarte en humildad y darle la adoración Jesucristo se merece. El profeta Isaías, en el capítulo 9 de su libro, hizo una gran profecía acerca de Jesús, el Mesías prometido:
Isaías 9:6 "Porque un niño nos es nacido, hijo nos es dado, y el principado sobre su hombro; y se llamará su nombre Admirable, Consejero, Dios Fuerte, Padre Eterno, Príncipe de Paz".
Recuerda siempre esto, Jesús no fue un niño ordinario ni mítico, pues hasta su nacimiento provoco que una multitud de ángeles cantara su gloria:
Lucas 2:13-14 "Y repentinamente apareció con el ángel una multitud de las huestes celestiales, que alababan a Dios, y decían: ¡Gloria a Dios en las alturas, y en la tierra paz, buena voluntad para con los hombres!"
Una más, cuando mires el pesebre (si es que tienes uno en casa) recuerda que sobre esa cuna la sombra de la cruz se proyectaba, porque el vino a morir por ti y darte salvación, nunca lo olvides, enséñalo a tus hijos, y comparte con tus amigos esta gran verdad.
Lo impresionante de esto es que Él, ahora ya no está en un pesebre, o se encuentra colgado en una cruz, Jesucristo ahora está sentado en Su trono como Dios y Señor, es cierto ¡Verdaderamente era, es y será el Rey de reyes y Señor de señores!... nunca lo olvides.
Publicado Ps Félix Jara
No hay comentarios:
Publicar un comentario