<h1>La gratitud como estilo de vida</h1>

Gratitud, agradecimiento, acción de gracias, reconocimiento por algo que se recibe. Llamémoslo como queramos, pero creo no equivocarme al reconocerla como la palabra que encierra la mayor hondura y significado, y la más noble, me atrevería a decir.

El hombre o la mujer que saben agradecer están prontos a reconocer la generosidad del otro, sabrán aquilatar en su verdadera dimensión aquello que, merecedores o no, han recibido. Comenzará así una cadena de buenos sentimientos hacia quien nos otorgó un bien, no importa si sólo fue una palabra, un gesto, una compañía, esa persona ha sido capaz de postergar su tiempo y su energía para compartirlos con nosotros. Y ¿qué puede haber más valioso en este mundo que el sentirse acreedor de esas dádivas?

La gratitud nos llena de un sentido de íntima complacencia, despierta en nosotros el afecto, la comprensión, la tolerancia. Surge como una respuesta pero a la vez suscita la necesidad de ser nosotros también partícipes en ese dar y recibir que tantas satisfacciones otorga.

La cadena comienza entonces a tomar forma, eslabón a eslabón, sólida, compacta. El ser humano estrecha sus vínculos, los perfecciona y casi sin darse cuenta ha logrado el milagro de la vida.

Por esto me atrevo a decir que la gratitud es la más noble de las virtudes. Porque es desde ella que se abrirán, como un abanico, las otras virtudes y sentimientos buenos: la amistad, el amor, la generosidad, la comprensión y muchos otros más. Y con ellos en nuestras maletas de eternos viajeros, nada habremos de temer en el largo viaje de la vida.

(*) De los escritos de: José Juventud.

Estas letras de los escritos de José Juventud, me hacen recordar lo que escribe el apóstol Pablo en su epístola a los Colosenses, así como la carta del autor de Hebreos, que inspirados por el Espíritu Santo animan a la Iglesia del Señor a ser gente agradecida, gente que aprenda a demostrar GRATITUD con Dios y para con su prójimo.

Hebreos 12:28-29 Así que,  recibiendo nosotros un reino inconmovible,  tengamos gratitud,  y mediante ella sirvamos a Dios agradándole con temor y reverencia; porque nuestro Dios es fuego consumidor.

Y es importante mencionar que el llamado que se hace en el libro de Colosenses a ser agradecidos, no se hace a manera de recomendación o sugerencia, o como una opción de vida, sino que se plantea como un ESTILO DE VIDA, es decir una forma de vivir de manera constante (el tiempo está en presente, por tanto la demanda es a practicar la acción continuamente).

Colosenses 3:15  Y la paz de Dios gobierne en vuestros corazones, a la que asimismo fuisteis llamados en un solo cuerpo;  y sed agradecidos.

Al respecto, hoy justamente se celebra en algunos países del orbe el DÍA DE ACCIÓN DE GRACIAS. Y los cristianos que no practicamos esta costumbre, lógicamente por no ser ciudadanos de esas naciones, deberíamos de aprovechar y hacer una evaluación personal.

Ver si es que somos gente que expresamos GRATITUD en todo tiempo, primero al Señor por tantas misericordias y maravillas en nuestras vidas (salvación, justificación, santificación, regeneración, redención, trabajo, familia, salud, familia, etc.); y segundo, con aquellos que en algún momento fueron de bendición para nosotros: tu esposa, esposo, tus hijos, padres, tus maestros, pastores, amigos, entre otros; gente que sin pedir nada a cambio, invirtieron tiempo, dedicación y esfuerzo por nosotros, y dejaron una enseñanza en tu vida.

Creo que si hacemos una lista de todos ellos nos faltaría espacio. Recuerda que son gente que Dios ha puesto opuso en el pasado a nuestro lado para ser canales de Su amor.

Por eso es triste ver a personas que rápido se olvidan de las bendiciones y atenciones que recibieron en el pasado, de aquellos que dieron su tiempo sin pedir nada a cambio; hijos que se olvidan del amor y del tiempo que sus padres dieron a cambio de nada, sin pedir nada a por eso; alumnos que recibieron enseñanza  y hasta amor de parte de sus maestros pues ellos invirtieron tiempo y horas de sueño para preparar sus clases   

Por tal motivo, te animo a que HAGAMOS DE LA GRATITUD UN ESTILO DE VIDA. NO SEAMOS INGRATOS. Enseñemos a nuestros hijos a ser agradecidos, seamos un modelo que ellos puedan imitar.

Hay más que decir o escribir , por eso esta historia continuará... te lo aseguro, tenemos mucho que charlar con relación a este tema... tu lo sabes. Nos encontramos este FDS.

Publicado por Ps. Félix Jara