En nuestras labores ministeriales, ya sea en la iglesia o aún en nuestros hogares, debemos reconocer que si bien estamos siendo de bendición para muchos; esto no viene de nosotros, pues solamente somos instrumentos del Señor en sus manos.
No podemos endilgarnos el privilegio de asumir que todo lo hicimos nosotros, pues otros vendrán a continuar la obra de Dios en la vida de aquellos que hemos discipulado por algún tiempo.
No podemos endilgarnos el privilegio de asumir que todo lo hicimos nosotros, pues otros vendrán a continuar la obra de Dios en la vida de aquellos que hemos discipulado por algún tiempo.
Por tanto empecemos a reconocer la dirección de Dios en nuestras vidas, a través de Su Espíritu, obedezcamos Su voz y no las voces de "vendedores de metodologías" para el crecimiento de la Iglesia del Señor; primero obedezcamos la voz de Dios, y luego démosle toda la Gloria a Él, y no nos ufanemos en "nuestros logros" que al final no son nuestros, sino del ALFARERO, pues SÓLO somos INSTRUMENTOS EN LAS MANOS DE DIOS.
Lo más importante es glorificar a Dios por medio de nuestro servicio, imitando la metodología y estilo de Jesucristo.
Así que la idea no es crecer y crecer a como e lugar, ni "gozarse" en ser la iglesia con el templo más hermoso y más grande del distrito o de la nación o del continente. No es la competencia ni el "ranking" ni el "rating" lo que debiera motivarnos, eso se llama "exitismo evangélico".
El tema es alcanzar a las almas sin Cristo pues nuestro corazón debe de haber pasión por ellas. No es lo cuantitativo (la cantidad o el número) lo que debe de primar en mi corazón, sino lo cualitativo en el creyenete; son las familias restauradas y tocadas por el poder de Jesucristo, son los hombres cambiados y consagrados que transformen sus hogares. Recordemos esto siempre, el ejemplo lo dio nuestro AMADO SALVADOR JESUCRISTO.
Así que la idea no es crecer y crecer a como e lugar, ni "gozarse" en ser la iglesia con el templo más hermoso y más grande del distrito o de la nación o del continente. No es la competencia ni el "ranking" ni el "rating" lo que debiera motivarnos, eso se llama "exitismo evangélico".
El tema es alcanzar a las almas sin Cristo pues nuestro corazón debe de haber pasión por ellas. No es lo cuantitativo (la cantidad o el número) lo que debe de primar en mi corazón, sino lo cualitativo en el creyenete; son las familias restauradas y tocadas por el poder de Jesucristo, son los hombres cambiados y consagrados que transformen sus hogares. Recordemos esto siempre, el ejemplo lo dio nuestro AMADO SALVADOR JESUCRISTO.
1 Corintios 3:6 Yo planté, Apolos regó, pero Dios ha dado el crecimiento.
Proverbios 14:2 El que anda en rectitud teme al SEÑOR, pero el de perversos caminos lo desprecia.
Publicado por Ps. Félix Jara
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